Es curioso, cómo incluso después de haber dejado el país, después de haber dejado de hablar tan seguido con ella, sigué ahí, muy cerquita, un remanente, que como su hipocorístico ha sido eterno en mi vida desde que apareció. Dos mujeres, que en su momento llevaron el apelativo de novia, le han odiado, o eso han dicho ¿por qué? Bueno, ha de ser por el mismo hecho que no le puedo olvidar, pero, que alguien me diga cómo se deja atrás alguien que te dió todo cuando nadie más lo hizo, que te apoyo como nunca antes. Eso y más es ella, mi remanente. No puedo mentir, puedo tener un mar de notificaciones, correos, y demás cosas de muchas personas, pero si ella aparece, sencillamente el resto no existe, su voz, su piel, sus labios, su cabello, su mirada, ella, en su totalidad, representa para mí un faro que guía

Continue ReadingRemanente

Bueno, a pedido especial de dos amigas hago este listado pese a mi recelo a hacer listas. Pero ahí va aunque sea duro de hacer, es que no sé, eso de escoger libros y demás es una tarea ardua. No serán 10, van a ser más porque 10 es muy mainstream.  Van sin orden exacto.  La trilogía de Sábato (El Túnel, Sobre Héroes y Tumbas, Abaddón el Exterminador) – Ernesto Sábado.  Esta trilogía me llegó en momentos complicados en los cuales, de cada libro me identifico con un personaje, los he releído hasta el cansancio y luche por conseguir versiones raras de los mismo, lo hice pero no fue fácil.  Supongo que es la cita más quemada del planeta pero me llegó cuando la leí y fue crucial porque con ella una de mis ex-novias me identificó. Ahí les va: — Existió una persona que podría entenderme. Pero fue, precisamente,

Continue ReadingLibros que marcaron mi vida.

Puta, puta y mil veces puta, te odio, te odio co locura de amor, pues ni por mas dinero que tenga te quedaras aquí, ¡Maldita! Puta eres. Placenteras noches te di y te daré pero una y mil veces mas has de fingir porque eres una puta y ese es tu trabajo. Meretriz, sigues los pasos de tus maestras, esas que te mostraron un camino de rosas con espinas, espinas que te han sangrados deformado hasta convertirte en el triste retrato de una puta famélica, fumas para ocultar el hambre que te ataca, así como te ataca la nostalgia, esa que ocultas tras una falta bajo la cual no hay más que una maltratada vagina que contrario a lo que michos piensan, ya ni placer genera pues gracias a ella llevas un triste vida, la vida de una puta(…) Aquí la segunda parte.